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 Laboratorio Electoral  ∙  Jun 29, 2022

El pulso electoral y la alternancia

“Endurecernos y caer en la rigidez es exponernos al fácil rompimiento del orden estatal y del orden político nacional. Frente a esta pretensión, el Presidente López Portillo está empeñado en que el Estado ensanche las posibilidades de la representación política, de tal manera que se pueda captar en los órganos de representación el complicado mosaico ideológico nacional de una corriente mayoritaria, y pequeñas corrientes que, difiriendo en mucho de la mayoritaria forman parte de la nación.”


-Jesús Reyes Heroles


Durante la transición a la democracia se ha buscado consolidar un sistema electoral que permita no solo la pluralidad política, sino también la competitividad electoral. Para ello se han realizado diferentes reformas en las que se ha promovido la creación de autoridades electorales autónomas e independientes que brinden certeza a los resultados electorales, un diseño normativo que plasme las diferentes ideologías y formas de pensar, reglas que permitan mayor equidad en la contienda, tales como las relativas al financiamiento público, el modelo de comunicación política y la neutralidad de servidores y servidoras públicas, mecanismos de solución de conflictos y controversias que garanticen la constitucionalidad y legalidad de los procesos electorales.


Este juego de reformas electorales que se ha venido diseñando desde 1977 hasta la fecha ha generado cambios importantes, que incluso en algún momento de la historia de nuestro país fueron impensables, tales como la alternancia en todos los niveles de gobierno, desde el municipal, los locales y hasta el federal, también la composición plural de los órganos colegiados – cabildos y congresos; a esto también se suma la creación de nuevos partidos políticos y prácticamente de una transformación total en el equilibrio de fuerzas políticas de entonces a la fecha.


Un nuevo pulso electoral y protagonismo de algunos partidos logró consolidar este sistema democrático en el que ningún partido puede mantenerse eternamente en el poder, sino que está sujeto a lo que la ciudadanía decida en las urnas, por lo que la alternancia parece ser la regla.


La democracia consiste en el constante cambio, en que a veces se es gobierno y a veces oposición, y en que un mismo partido no siempre va a lograr abrazar las demandas ciudadanas. Este cambio lo revisamos en esta entrada con el análisis del resultado obtenido por los partidos políticos en las últimas 3 elecciones a la gubernatura y el panorama general de la llamada alternancia en el poder.


Una caída constante


A nivel federal hay 7 partidos con registro ante la autoridad electoral, los cuales, han visto su pulso electoral modificado durante los últimos años y varios han experimentado fuertes cambios en los resultados electorales obtenidos. Ejemplo de esto, es el PRD, que ha ido perdiendo fuerza en varias zonas territoriales. Sus resultados en elecciones previas -a la celebrada el pasado 5 de junio-, muestran cada vez más, la clara necesidad de algunos partidos de aliarse para conservar su registro y no así, para mantener un programa en conjunto con sus aliados.


En los anexos al final de este documento, se vislumbra que, en entidades como Aguascalientes y Tamaulipas, partidos como el PAN, PRI y PRD dejaron de competir por su cuenta -como sucedió en las elecciones de 2010-, para hacerlo en coalición -como ocurrió en las pasadas elecciones -. Por su parte, en Durango, Hidalgo, Oaxaca y Quintana Roo ha existido una constante de participar en gobierno de coalición y de candidatura común; esto implica que poco a poco los partidos políticos han considerado necesario unir fuerzas en conjunto y ceder incluso en la conformación de liderazgos locales.


Bien sabemos que las alianzas políticas han cambiado pues, a pesar de que el PAN y el PRD ya se habían presentado juntos en diferentes elecciones -como las Durango, Oaxaca y Quintana Roo en 2016-, en este 2022 sumaron a sus coaliciones al PRI -que ya no cuenta con el apoyo del PT ni el PVEM. Morena ha crecido exponencialmente desde 2016 a la fecha, sumando los apoyos de partidos satélite que antes acompañaban al PRI. Asimismo, vemos como Movimiento Ciudadano, de no participar en varias elecciones en 2016 o hacerlo en coalición con diferentes partidos en 2010, decidió hacerlo en solitario en las 6 elecciones de este año y el proceso pasado, con resultados modestos pero progresivos, pues ha ido ampliando su presencia a nivel nacional.


¿Alternancia?


Poco a poco los partidos han modificado sus estrategias electorales para ganar procesos en los tres niveles de gobierno y poder llevar a cabo sus proyectos de cambio. En algunos casos los partidos han necesitado alianzas para ganar elecciones o, en el mejor de los escenarios, no perder el registro como partido.


A las elecciones de 2022, 30 de las 32 entidades federativas han tenido alternancia en los gobiernos locales, solo el Estado de México y en Coahuila, no han tenido alternancia en el gobierno, han sido siempre gobernados por el mismo partido. Hidalgo ha sido el último estado en tener alternancia, esto fue ahora en 2022, antes fue Campeche y Colima en 2021. Las dos entidades que no han tenido alternancia tendrán elecciones a la gubernatura en 2023.


Desde 1989 se han presentado alternancias en el ejecutivo local. La primera entidad fue Baja California con la victoria del PAN y su candidato Ernesto Ruffo. La siguiente entidad fue Chihuahua en 1992 cuando de nuevo el PAN ganó con su candidato Francisco Barrio.


El PRD obtuvo por primera una gubernatura en 1997 al ganar las primeras elecciones democráticas para la jefatura de gobierno de la Ciudad de México, de la mano de Cuauhtémoc Cárdenas. En 1998 el PRD ganó nuevamente y se consiguió la alternancia en Zacatecas y Tlaxcala. Así el PRI empezó poco a poco a perder su hegemonía de partido único en el poder.


De las entidades que tuvieron elecciones en este 2022, Aguascalientes ha tenido 3 alternancias en su historia y estas han sido entre el PRI y el PAN. Durango solo tuvo una alternancia en 2016, pasando del PRI al PAN. Hidalgo, -como se mencionó, no había tenido alternancia hasta este 2022, pasando del PRI a Morena. Oaxaca ha tenido tres alternancias entre 2010 y 2022, pasando por MC, el PRI y Morena. Por su parte Quintana Roo ha tenido alternancia en el ejecutivo local pasando del PRI al PRD y a Morena. Por último, Tamaulipas solo ha tenido 2 alternancias, pasando del PRI al PAN y ahora a Morena.


Por otro lado, la entidad que más alternancias ha tenido es Chiapas con un total de 5 llegando a tener en el cargo del ejecutivo local al PRI, al PRD -2 veces-, al PVEM y a Morena. A este le siguen Michoacán, Nayarit, Nuevo León y Tlaxcala con 4 alternancias cada uno.


En el extremo opuesto, se encuentran Durango, Guanajuato, Campeche, Colima, e Hidalgo, con una sola alternancia. Las primeras 2 de ellas fueron del PRI al PAN y las 3 restantes del PRI a Morena. Tres de ellas fueron entre 2021 y 2022.


¿Qué implicaciones tiene todo esto?


La primera: el sistema electoral que se ha construido ha permitido que haya no solo certeza en las elecciones, sino también equidad y competitividad, el resultado es que casi todas las entidades han vivido al menos 1 alternancia en su historia. Y solo 3 de las 30 que han vivido alternancia, lo hicieron apenas en el último año. Llevamos más de 33 años de alternancias constantes en los gobiernos locales.


La segunda: las alternancias han reconfigurado por completo el mapa político del país, el PRI pasó de dominar por completo las elecciones a solo tener dos gubernaturas actualmente, las cuales estarán en juego en 2023, en cambio Morena pasó de ser el partido de creación más reciente a ser el mayoritario, el PAN se ha mantenido con algunas altas y bajas, el PRD se ha reducido de tal forma que ahora solo busca conservar su registro, Movimiento Ciudadano ha crecido, gobierna dos entidades y tiene una mayor presencia nacional, y el Verde y el PT han logrado mantenerse a base de alianzas con las fuerzas políticas mayoritarias. Aunque la renovación del mapa político poco ha implicado la existencia de nuevos actores políticos, sí representa cambios importantes del sistema de partidos.


La tercera: La ciudadanía tiene en el voto el poder de cambiar a sus gobiernos, y de buscar las alternativas que consideren que van a mejorar sus condiciones de vida y si no funcionan a los seis años pueden cambiar no solo de gobernantes, sino también de partidos políticos, aunque suena lógico, esto era algo que hace 35 años no se podía.



Anexo 1: votación de los partidos nacionales en las 6 entidades que renovaron gubernatura este año y durante las últimas 3 elecciones similares (2010, 2016 y 2022)


Aguascalientes

 

2010

2016

2022

PAN

42.46%

43.81%

Coalición

PRI

48.4%

Coalición

Coalición

PRD

4.36%

Candidatura común

Coalición

PT

2.65%

4.22%

Coalición

PVEM

Coalición

Coalición

Coalición

MC / Convergencia

Coalición

Candidatura común

6.95%

Morena

No aplica

3.18%

33.52%

Partido local

No aplica

Coalición

1.38%

Coalición

PRI, PVEM, PANAL

47.67%

PRI, PVEM, PANAL y PT

40.89%

PAN, PRI, PRD

53.56%

Candidatura común: PRD y MC

5.13%

PVEM, PT

1.56%

Candidatura independiente

No aplica

2.74%

No aplica

 

Durango 

 

2010

2016

2022

PAN

Coalición

Coalición

Coalición

PRI

48.4%

Coalición

Coalición

PRD

Coalición

Coalición

Coalición

PT

4.2%

4.22%

Coalición

PVEM

0.9%

Coalición

Coalición

MC / Convergencia

Coalición

No participó

4.48%

Morena

No aplica

2.72%

Coalición

Partido local

0.6%

Coalición

Coalición

Coalición

PAN, PRD, Convergencia

45.9%

PRI, PVEM, PNA, PD

42.40%

PAN, PRI, PRD

53.74%

PAN, PRD

46.06%

PVEM, PT, Morena, RSP

38.85%

Candidatura independiente

No aplica

1.15%

No aplica


Hidalgo

 

2010

2016

2022

PAN

Coalición

28.90%

Coalición

PRI

Coalición

Coalición

Coalición

PRD

Coalición

15.07%

Coalición

PT

No aplica

2.63%

Coalición

PVEM

Coalición

Coalición

1.14%

MC / Convergencia

Coalición

No participó

3.08%

Morena

No aplica

7.74%

Coalición

Partido local

No aplica

Coalición

Coalición

Coalición

PAN, PRD, Convergencia

47.35%

PRI, PVEM, PANAL

45.67%

PANAL, PT, Morena

61.56%

PRI-PVEM-PANAL

52.65%

PAN, PRI, PRD

31.33%

Candidatura independiente

No aplica

No aplica

No aplica


Oaxaca

 

2010

2016

2022

PAN

Coalición

Coalición

3.77%

PRI

Coalición

Coalición

Coalición

PRD

Coalición

Coalición

Coalición

PT

Coalición

5.07%

Coalición

PVEM

Coalición

Coalición

Coalición

MC / Convergencia

Coalición

No participó

3.27%

Morena

No aplica

10.78%

Coalición

Partido local

3.34%

4.53% (sumando sus porcentajes)

Coalición

Coalición

PAN, PRD, PT y Convergencia

50.11%

PRI, PVEM, PANAL

42.36%

PT, PVEM, Morena y PUP

60.26%

PRI, PVEM

41.90%

PAN, PRD

33.43%

PRI, PRD

25%

Candidatura independiente

No aplica

No aplica

2.59% (sumando sus porcentajes)


Quintana Roo

 

2010

2016

2022

PAN

15.51

Coalición

Coalición

PRI

Coalición

Coalición

2.96%

PRD

Coalición

Coalición

Coalición

PT

Coalición

1.49%

Coalición

PVEM

Coalición

Coalición

Coalición

MC / Convergencia

Coalición

No participó

4.48%

Morena

No aplica

11.35%

Coalición

Partido local

Coalición

No aplica

7.10%

Coalición

PRI, PVEM, PANAL

52.59%

PAN, PRD

46.97%

Morena, PT, PVEM y FXM

56.40%

PRD, PT, CONVERGENCIA

26.07%

PRI, PVEM, PANAL

36.67%

PAN, PRD, ConfQR

16.13%

Candidatura independiente

No aplica

No aplica

No aplica


Tamaulipas

 

2010

2016

2022

PAN

30.81%

50.17%

Coalición

PRI

Coalición

Coalición

Coalición

PRD

2.84%

1.20%

Coalición

PT

1.19%

0.57%

Coalición

PVEM

Coalición

Coalición

Coalición

MC / Convergencia

1.11%

5.89%

3.15%

Morena

No aplica

2.23%

Coalición

Partido local

No aplica

No aplica

No aplica

Coalición

PRI, PVEM y PANAL

61.58%

PRI, PVEM, PANAL

36.09%

PAN, PRI, PRD

44.20%

PVEM, PT, Morena

49.99%

Candidatura independiente

No aplica

0.6%

No aplica